Lectio del segundo Cántico del Siervo de Yahvé: Isaías 49,1-6. Compartir Navegación de entradas AnteriorJn 13, 21-38: En contraluz con Jesús: traición y negaciónSiguienteMt 26, 14-25: Un Jesús que se expone 2 comentarios Mary Toscano de Carvajal Abr 08, 2020 - 12:36 pm Muchas gracias padre. Ud. se gasta y se desgasta por nosotros. Quiera Dios que no lo defraudemos. Responder Karin Abr 08, 2020 - 3:53 pm «Estaba yo en el viente, y el Señor me llamó; en las entrañas maternas, y pronunció mi nombre.» Responder Deja un comentarioCancelarTu dirección email no será publicada. Los campos requeridos están marcados * Guarda mi nombre, correo electrónico y web en este navegador para la próxima vez que comente.
Muchas gracias padre. Ud. se gasta y se desgasta por nosotros. Quiera Dios que no lo defraudemos.
«Estaba yo en el viente, y el Señor me llamó; en las entrañas maternas, y pronunció mi nombre.»