Compartir Navegación de entradas AnteriorLucas 7, 18-23: ¿Eres tú?SiguienteMateo 1, 18-24: Obediencia de José 1 comentario María Daissy Peña Saldaña Dic 18, 2020 - 8:38 am Gracias Padre Fidel 🙏🏻🙏🏻🙏🏻 Responder Deja un comentarioCancelarTu dirección email no será publicada. Los campos requeridos están marcados * Guarda mi nombre, correo electrónico y web en este navegador para la próxima vez que comente.
Gracias Padre Fidel 🙏🏻🙏🏻🙏🏻