Claramente en nuestra vida vamos pasando por diferentes etapas, desde nuestra niñez, juventud y algunos ya en la adultez. Etapas que para algunos pueden ser complejas dado que pueden vivir momentos difíciles ya sea por problemas intrafamiliares.
Si ya se está en la etapa adulta, es bueno que hagamos una pausa, que nos detengamos a evaluar ciertas etapas, pues si tenemos miedos, rencor, orgullo, resentimientos, es el momento, para evaluarnos y ver si vale la pena seguir así, con el corazón armado de cosas que no dan tranquilidad y paz.
Esas etapas que vamos viviendo nos deben dar un crecimiento, de cosas buenas, porque de seguro nadie vive feliz y odiando, es difícil ver a una persona llena de orgullo y rencor ser feliz, es alfo absurdo. En cambio, si decides reflexionar sobre la vida y ver que coas hay que se deben cambiar, la vida va a tener otro color, vas a empezar a tener paz, tranquilidad interior que nadie te puede quitar.
Así que te animamos a seguir con tu vida, a detenerte a reflexionar y si en alguna de esas etapas debes volver para arreglar las cosas contigo mismo, hazlo sin miedo y sin pena, es un momento que es personal y solo tú eres quien puede ayudar a sanara la herida, y de esta manera continuar con el camino.
No estás solo, Dios te acompaña en el camino y ayuda a sanar, reconciliar aquellas cosas no tan buenas que hay en el corazón. Dentro de estos podcasts puedes tomar un espacio y alimentarte más sobre las etapas de la vida.