Compartir Navegación de entradas AnteriorLucas 24, 35 – 48 Ustedes son mis testigosSiguienteMc 16, 9-15: Somos misioneros de una esperanza Deja un comentarioCancelarTu dirección email no será publicada. Los campos requeridos están marcados * Guarda mi nombre, correo electrónico y web en este navegador para la próxima vez que comente. El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página. Entradas relacionadasRead moreNOVEDADES DE FIN DE A...Read moreAsí celebramos los 35 AÑOS de la Emis...Read moreLa Fe en Dios rompe las barreras de t...Read more¿Cómo invocar la Presencia del Espíri...