La Palabra de Dios ha llegado a nosotros esta tarde a través de la reflexión del padre Jhon Montoya, quien nos ha presentado 3 signos o cualidades que se presentan en aquellos que tienen a Dios en su corazón, para que estos signos estén presentes debemos primero arrepentirnos de nuestros pecados y convertirnos totalmente hacia Dios, para conservar esa paz infinita que nos llena y que proviene de Él.
El primer signo que podemos reconocer, es cuando empezamos a obrar de la manera que lo hacía Cristo, dejándonos llevar por nuestro corazón, guíado por el amor y el ejemplo de nuestro Señor, para así poder también llegar incluso a curar corazones y cuerpos como Él lo hacía.
El segundo paso es vivir a Cristo con nosotros a través de su Palabra, comprenderla y leerla desde el punto de vista cristiano, es aquí cuando realmente nos enamoramos de la biblia y hacemos una lectura real, desde el corazón, de las enseñanzas de Jesús nuestro Señor y la compartimos con nuestro prójimo, con amor y dedicación.
El tercer signo para saber que Dios está con nosotros es ser mártires, que demos testimonio de Jesucristo, anunciarle a los demás la manera en que vivimos con Dios en nuestro corazón y seamos ejemplo en vida de la Palabra del Señor, no quedarnos solamente en la lectura, sino demostrar con hechos que Dios Todopoderoso habita en nosotros, en nuestro cuerpo y alma.
Así que, hermanos y hermanas, el llamado de Dios hoy, es a que tengamos una conversión de corazón que lo aceptemos en nuestras vidas y llevemos su Palabra a todo lugar y en todo momento; para que nuestras reflexiones no se queden solamente plasmadas en palabras, sino que vivamos realmente a Cristo en nuestro día a día y se vea reflejado en cómo tratamos al prójimo y vivimos nuestra vida.