Compartir Navegación de entradas AnteriorLucas 16,1-8 “¿Qué voy a hacer?”SiguienteMarcos 12,38-44 La ofrenda de la viuda Deja un comentarioCancelarTu dirección email no será publicada. Los campos requeridos están marcados * Guarda mi nombre, correo electrónico y web en este navegador para la próxima vez que comente. El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página. Entradas relacionadasRead moreLa música sana y transforma nuestras ...Read moreLa oración es la fortaleza para el cr...Read morePENTECOSTÉS PERMANENTE PARTE 1Read moreContinúan los actos vandálicos en Bogotá