Compartir Navegación de entradas AnteriorEl gran banquete del Mesias. Isaias 25, 6 – 10 / Mateo 15, 29- 37SiguienteNo te abandonaré: Lectio de Isaías 41,13-20 y Mateo 11,11-15 Deja un comentarioCancelarTu dirección email no será publicada. Los campos requeridos están marcados * Guarda mi nombre, correo electrónico y web en este navegador para la próxima vez que comente.