Como aquel día glorioso de pentecostés, muchos fueron testigos de la acción poderosa del Espíritu Santo, así fue el evento del pasado domingo 23 de mayo de 2021, organizado por la Red de Emisoras Minuto de Dios en Colombia, donde casi cuatro mil personas estuvieron congregadas en la transmisión en vivo por Minuto de Dios de Tv. El teatro Minuto de Dios fue el epicentro del gran evento que unió muchos países entre ellos: Estados Unidos, Nicaragua, Perú, Costa Rica, Paraguay, Chile entre otros. El acontecimiento fue difundido por toda la Red de Emisoras en Bogotá, Medellín, Barranquilla y Cartagena, además de RCCradio.fm por lo que fueron muchos colombianos unidos en oración y ungidos por la gracia del Santo Espíritu.
El evento estuvo animado y asistido por la acción del Espíritu Santo, fueron muchos comentarios de personas alrededor del mundo quienes experimentaron el poder del Paráclito a través de las predicaciones realizadas por el Padre Javier Riveros, director de la Emisora Minuto de Dios, y por el Padre John Mario Montoya, director de la Emisora Minuto de Dios en la Costa Caribe, quienes también oraron clamando la presencia viva del santo Espíritu, para que Colombia fuera inundada por sus dones y carismas.
El júbilo, la alegría y el gozo de Pentecostés se experimentaron a través de los diversos ministerios de música católica, Carisma Verde dio la apertura al evento, con su diversidad musical puso a danzar a cientos de familias en muchos países que estaban presentes en la trasmisión y sobre todo a los radioescuchas de la Red de Emisoras Minuto de Dios. Desde Paraguay se unió al evento la cantante católica, Gladys Garcete, quien animó el acontecimiento con su voz y su oración.
La Misa de clausura de Pentecostés, fue presidida por el presidente de la Organización Minuto de Dios, padre Diego Jaramillo, gran predicador de la Renovación Carismática Católica a nivel latinoamericano, quien en su homilía hizo énfasis que “Pentecostés es un estado de vida” que debemos vivirlo siempre en nuestra vida, que el “Espíritu Santo es como torrente de agua que debe inundar nuestra existencia”.
Que la alegría vivida en este Pentecostés sea signo de esperanza y de amor que está surgiendo en medio de la realidad que actualmente vivimos los colombianos.
¡Sigamos clamando un nuevo pentecostés para Colombia!