Compartir Navegación de entradas AnteriorMarcos 2,18-22 La gracia de un Dios esposo Vino nuevo en odres nuevosSiguienteMarcos 3,7-12 “Se arrojaban sobre él” Deja un comentarioCancelarTu dirección email no será publicada. Los campos requeridos están marcados * Guarda mi nombre, correo electrónico y web en este navegador para la próxima vez que comente. El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página. Entradas relacionadasRead moreEl mesías ha nacido para salvar al mundoRead moreSanación: lo que tu vida necesita.Read moreObispos: Confianza en Dios, responsab...Read more¡Alaba a Cristo Resucitado!